sábado

Donde habita el olvido

No hacía tanto tiempo que se había creado necesidades,
no eran necesidades comunes, como las que puede tener una
persona cualquiera diariamente, eran algo más extrañas,
pero si las necesitaba cada día.
Pedía una sonrisa cada día, no una sonrisa cualquiera, si no
una sonrisa sincera, de esas que realmente te llenan, e incluso
de esas sonrisas que incluyen con ellas algo de complicidad
Pedía un consejo, si, necesitaba un consejo diario,¿Porqué no?,
buscaba algo que le ayudase a pensar un poco en todo
Pedía una aprobación, un punto de vista positivo a algo que pensara
o que buscase realizar, algo tan dificil en los últimos tiempos,
ya que nada de lo que hacia conllevaba un punto de aprobación de las
personas que realmente le importaban
Pedía una conversación despreocupada, una de tantas, una de esas que
había tenido hasta ese día, pero que parecia que poco a poco iban desapareciendo
y que el cúmulo de propósitos había hecho que todo fuese cada vez más seco, pero en parte, menos distante
Cosas inútiles,cosas extrañas, pero que día a día iba echando de menos, porque ya nada era lo mismo, porque nada era igual
Pedia no encontrarse nunca donde habita el olvido de su mente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario